jueves, 13 de agosto de 2009

33 años después, podés descansar en paz...


Querido "Negrito" Floreal Avellaneda:

Pasaron 33 años y unos meses de aquel triste día en que ellos acabaron con tu vida. Apenas 15 años tenías, apenas eras un pibe; como yo, como cualquier otro. Pero no tuvieron piedad; apenas 15 años tenías, pero te secuetraron igual; apenas 15 años tenías, pero te mataron como si nada. Quién puede ser tan vil, me pregunto, Negrito, para acabar con tu vida de tal manera. Quién puede tener tan poco corazón para robarle la vida, me pregunto, Negrito, a un pibe de apeñas 15 años. Pero sin embargo ellos existieron... ellos existen.

Pasaron 33 años y unos meses de aquel triste día, Negrito, pero te escribo para contarte que ayer, después de tantos años de impunidad, se hizo justicia. Sí, Negrito, se hizo justicia. Hoy podés descansar en paz, porque tu vieja, tu viejo, y todos los que estuvimos ahí te vengamos. Aunque muchos no te conocimos, Negrito, tenés que saber que el sonido de tu nombre inspira en nosotros el mayor sentimiento de lucha, de justicia, de valor. Y con eso que nos inspirás, Negrito, te bancamos hasta el último momento. Lloramos, festejamos y gritamos tu nombre porque al fin se hizo justicia.

Sólo eso, Negrito, quería decirte. Que podés descansar en paz, que por fin se hizo justicia, y sobre todo, que una página de nuestros corazones lleva tu nombre...

No hay comentarios:

Publicar un comentario